Aunque los carros pequeños a gasolina cada vez son menos rentables, la electrificación permite mantenerlos vivos. Así lo entendió el CEO del Grupo Renault.
Con los cambios tan drásticos que ha vivido la industria automotriz en los últimos años, se ha hecho cada vez más difícil mantener vigentes aquellos carros pequeños y urbanos que fueron, durante décadas, los más populares del mercado. La inclusión de múltiples tecnologías, elementos de seguridad y confort, y mecánicas más complejas, han obligado a que los nuevos modelos sean más grandes y robustos.
Pero, con todo y esa circunstancia, varios fabricantes se resisten a dejar morir a los autos urbanos. El abanderado de esa idea es Renault, cuyo jefe máximo, Luca de Meo, ha visto en la electrificación una tabla de salvación para este tipo de vehículos. Y su interés es tal, que ha hecho varias propuestas al respecto a otros fabricantes.
Una de ellas es impulsar una legislación que buscara proteger a los vehículos más pequeños a través de diversos beneficios, y otra es la creación formal de un nuevo segmento similar a los Kei Cars japoneses, conformado por cuadriciclos como el Opel Rocks-e y sus gemelos. Para De Meo, justo ahí está la posibilidad de masificar, realmente, los carros eléctricos.
Los futuros carros urbanos y eléctricos de Renault
Por eso, es claro que Renault trabaja en el desarrollo de varios vehículos de este tipo. El primero de esos, que además será su carro eléctrico de menor precio, es la próxima generación del Twingo cuyo estreno está previsto para 2025. Así mismo, los franceses trabajan en la versión de producción del Mobilize Duo, cuadriciclo que tomará el lugar del pionero de esa categoría, el Twizy.
Con estos nuevos modelos, así como otros tantos que vienen en camino por parte de otros fabricantes, esperan reanimar las ventas de carros eléctricos y, claro, de carros urbanos en Europa. Según el CEO de Renault, este tipo de vehículos podrían “reactivar las ventas en la clase media” dado que esta población recorre menos kilómetros diarios y priorizan la economía sobre grandes lujos en sus carros.
En palabras de Luca de Meo, “el futuro pasa por volver a los fundamentos de la industria, el desarrollo masivo de autos pequeños para desplazamientos urbanos y repartos de última milla, añadiendo ventajas como sitios de parqueo reservados, parqueaderos más baratos y puntos de carga reservados”.
Oportunidad
Incluso, De Meo fue más allá y propuso la unión de varios fabricantes de vehículos, con miras a crear una asociación para cooperar en el desarrollo y producción de este tipo de carros urbanos. Al respecto, el CEO de Renault explicó que, desde su punto de vista, “los autos compactos podrían crear un superávit de crecimiento en Europa, de 500 millones de euros y crear 10.000 puestos de trabajo”.
Dicho todo esto, los vehículos de entrada podrían ser una oportunidad para el crecimiento de la industria automotriz, tal como lo han identificado los fabricantes chinos, que sí impulsan en gran medida este tipo de carros. Otras firmas tradicionales, como Volkswagen y Ford, ya trabajan en el desarrollo de nuevos modelos eléctricos de entrada. ¿Llegarán a ser tan populares como antes, ahora eléctricos?
Óscar Julián Restrepo Mantilla. Con información de Híbridos y Eléctricos.
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