El fabricante chino de camiones eléctricos Windrose busca esquivar los aranceles impuestos por Estados Unidos y plantar cara a Tesla Semi con una nueva fábrica en suelo norteamericano.
La feroz competencia en el mercado de los camiones eléctricos está alcanzando nuevos niveles. Mientras que Tesla ha dominado la industria con su Tesla Semi, un rival chino está decidido a robarle protagonismo.
Windrose, el fabricante asiático de camiones eléctricos, ha anunciado sus planes para establecer una planta de producción en Estados Unidos. Esta es una jugada que no solo refuerza su presencia en el mercado norteamericano, también le permite esquivar los altos aranceles impuestos por el gobierno de Joe Biden.
Las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China han llevado a la administración Biden a imponer aranceles del 100% a los vehículos eléctricos chinos, cuadruplicando las tasas habituales y creando un serio desafío para los fabricantes que dependen de las importaciones desde Asia. Esta medida se suma a los ya elevados aranceles en Europa, que varían entre 17,4% y 37,6%, sobre el 10% previamente aplicado.
Windrose la competencia para Tesla Semi
Ante este escenario, Windrose ha decidido tomar medidas drásticas para evitar estos costos adicionales que podrían afectar su competitividad en el mercado estadounidense. La solución: construir una fábrica en territorio norteamericano. Con esta estrategia, la compañía no solo busca proteger sus márgenes de beneficio, sino también capitalizar el creciente interés de las empresas estadounidenses en sus camiones eléctricos.
El camión eléctrico de Windrose, el Windrose EV, ha sido diseñado para rivalizar directamente con el Tesla Semi de Elon Musk. Equipado con un paquete de baterías de 729 kWh que ofrece una autonomía de 600 kilómetros por recarga, y capaz de admitir cargas a una potencia de 960 kW, el Windrose EV puede recargar hasta el 80% de su capacidad en solo 30 minutos.
Estas especificaciones ponen al camión de Windrose a la par con el Tesla Semi, que aunque promete 800 kilómetros de autonomía, en pruebas reales ha mostrado un rendimiento similar al del modelo chino.
Además, el Windrose EV, con su sistema de ejes 6×2, no solo rivaliza en prestaciones con el camión de Tesla. Además, se asemeja en diseño y tecnología, lo que ha llevado a algunos a considerarlo una “copia” del modelo de Elon Musk. Sin embargo, su creciente popularidad es innegable, con 6.500 pedidos ya confirmados, la mayoría provenientes de empresas norteamericanas.
La proyección de Windrose
Mientras Windrose se prepara para dar el gran salto al mercado estadounidense, también está mirando hacia Europa. Con los aranceles europeos en aumento, la compañía contempla la construcción de otra planta en el continente para asegurar su competitividad y atender la creciente demanda.
Por lo pronto, podemos decir que Windrose ha demostrado que está dispuesto a jugar duro en la batalla por el mercado de los camiones eléctricos. Al evitar los aranceles con la apertura de una fábrica en EE.UU., la empresa no solo protege su negocio, sino que también envía un mensaje claro a Tesla: no están solos en esta carrera. La pregunta es, ¿podrá Tesla mantener su liderazgo, o el Windrose EV se convertirá en la nueva estrella de la carretera?
Paola Reyes Bohórquez. Con información de Híbridos y Eléctricos.
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