El cierre de todos los accesos y salidas de la ciudad de Wuhan, China, a causa del coronavirus, ya comenzó a afectar a marcas con fábricas en dicha ciudad, como Renault y GM.
A estas alturas todo el mundo está enterado de la existencia del coronavirus que se propaga lenta pero muy visiblemente por todo el mundo, partiendo desde Wuhan, China. Lo que pocos saben son las consecuencias que este le ha generado a la ciudad.
A causa del virus, y con miras a evitar su propagación, el gobierno chino anunció, desde la semana pasada, el bloqueo de todas las vías de acceso y salida de la capital de la provincia de Hubei.
Lo anterior no sólo significa una especie de cuarentena para todos los habitantes de Wuhan, sino también una paralización parcial de su economía. Se trata de una medida que, entre otras cosas, afectó a la industria automotriz.
Fabricantes paralizados
Es que no son pocos los productores de automóviles que se han visto afectados por el brote de coronavirus de Wuhan. GM, Nissan, Renault, Peugeot, Citroën, DS y Honda fabrican y exportan algunos de sus modelos desde dicha ciudad.
La noticia golpea fuerte si tenemos en cuenta que, durante 2019, las ventas de autos en china cayeron en 2.3 millones de unidades. Entre los más afectados se encuentra Honda que tiene en la ciudad tres fábricas y el 11 % de sus ingresos globales.
Le siguen GM, que tiene el 10 % de su capacidad de producción china en Wuhan con la presencia de 6.000 trabajadores; y Renault, que tiene 2.000 empleados y ya vio una baja del 7 % en sus acciones, adicional al 7 % producido por el escándalo de Carlos Ghosn.
¿Qué pasará?
Con las actividades productivas de Wuhan, una ciudad de 11 millones de habitantes, prácticamente bloqueadas a causa del coronavirus, se prevé que la economía china vea una caída del 1.2 %.
Según las propias autoridades chinas, es de esperar que esa caída también afecte las ventas de vehículos, que verían este año una nueva disminución por un orden superior al del 8 % con el que venía cayendo el año pasado.
El alivio, al menos por el momento es que la mayoría de las fábricas ya tenían agendado un cierre por las festividades del año nuevo chino. El problema llegará cuando reanuden operaciones sin poder sacar los vehículos de la ciudad. Lo importante, no obstante, es contener la presencia del virus mientras se haya una cura.
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*Con información de CNN
