El protagonista de la historia es Jorge, un hombre de 58 años que habita en su Dodge Polara desde hace 4 años. Durante la cuarentena es el único lugar de vivienda que tiene, siendo invisible para el Gobierno Distrital.
Un Dodge Polara Station Wagon, es lo único que Jorge tiene por ahora, luego de pasar por problemas familiares, donde tuvo que abandonar su casa, llevandose únicamente su viejo amigo modelo 1978, donde vive y trabaja al tiempo en la central de Abastos en Bogotá, haciendo acarreos.
El «cuarto» donde Jorge duerme, es la silla trasera del viejo Dodge Polara, donde acomoda un par de cobijas y una posición algo incómoda, pero a la que ya esta acostumbrado para poder pasar las noches sin afectar sus rodillas, que a su edad, ya no se encuentran en sus mejores días.
Su fe y aferramiento a Dios, es lo que lo mantiene vigente y con ganas de salir adelante apesar de las circunstancias. Su vehículo y vivienda se ubica frente a la estación de Transmilenio de Banderas en Bogotá, donde se le facilita su trabajo de acarreos para ganarse el sustento para sobrevivir y mantener su carro.
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Dentro de las actividades que Jorge realiza en su cotidianidad y de donde tiene acceso al agua, es desde una alcantarilla ubicada al lado de donde parquea su carro, agua que utiliza para su aseo personal.
La crisis vivida por el Covid-19 ha dejado ver muchas problemáticas de gente en estado de vulnerabilidad, los cuales eran invisibles para el mundo. Es clara la falta de apoyo para personas que no tienen un lugar seguro de vivienda y mucho menos un lugar para pasar la cuarentena con toda la seguridad.
Por ahora Jorge, atiende muy juiciosamente las medidas de protección como uso de tapabocas y gel antibacterial, que la gente del sector le ha facilitado. De acuerdo a lo que le dijo a Caracol Radio «solo espero conservar su salud y no tener que terminar en un hospital«.
Dodge Polara
Producido en la planta de Colmotores en Bogotá, el Dodge Polara estuvo vigente desde 1977 hasta 1978, donde se presentó en carrocería sedán y station wagon, posicionándose entre el Simca 1000 y el Dodge Dart, además de entrar en un mercado donde el Renault 12 era su competencia directa.
El Dodge Polara contaba con un motor de 1.798 c.c. con 88 caballos de potencia y torque de 147 Nm, acoplado a una transmisión de 4 velocidades, que arrojaba la potencia a las ruedas traseras. Este vehículo compacto era bastante ágil y divertido de manejar en su época.
Este vehículo surgió como una mejora del Dodge 1500, pasando de un motor de 1.5 Litros a 1.8 Litros. Incorporó un nuevo diseño de luces y parrilla, además de mejoras en el confort interior con sillas más cómodas y seguras debido a sus reposacabezas integrados.
Ver también: Dodge 1500 y Polara en Colombia, elegantes y dinámicos para su época