En un país que apenas empezaba a mudar del campo a la vida urbana y con un mercado automotor muy reducido, el Renault 12 se convirtió en el carro más solicitado de su tiempo a pesar de ser un modelo de gama media-alta.
Al tiempo que despegaba la industria automotriz colombiana y con ella una verdadera competencia de mercado en este ramo, la brecha entre los carros populares ya presentes y los sedanes familiares aún era muy amplia sin muchas opciones para elegir, dejando modelos como el Simca y el Renault 4 para la clase media y otros más grandes como el Dodge Dart para los más pudientes.
Siendo el Zastava 1300 producido por Leonidas Lara el único representante del segmento de sedanes intermedios, en 1973 se dio un importante paso que permitió que muchas familias alcanzaran el sueño de tener un carro amplio, potente y de cierta representación, sin llegar a ser inalcanzable.
Casi al tiempo, llegaron a las calles colombianas los Dodge 1500, Fiat 125 Polski y Renault 12 con intenciones de atrapar esa clientela que aún no encontraba un vehículo de su gusto. Por ahora nos ocuparemos del modelo francés, que se consolidó como el carro familiar por excelencia en la década de 1970.
Para todo el mundo
Presentado durante el Salón del Automóvil de París en septiembre de 1969, el Renault 12 se desarrolló con una idea futurista respecto a su diseño recurriendo a las novedosas teorías de aerodinámica. Así se logró una apariencia única que se denominó «línea flecha» cuyo objetivo, además de darle personalidad a nivel estético, era reducir la resistencia al viento favoreciendo su comportamiento en ruta.
Desde los primeros esbozos la meta fue crear un auto de carácter global, razón por la cual su estructura se configuró de tal forma que fuera fácil de producir en plantas con una capacidad industrial muy básica, siendo a su vez un carro robusto, económico, duradero y de fácil mantenimiento, que prestara un servicio eficaz en todas las partes del mundo.
Para los mercados internacionales, el Renault 12 contó con motores de 1.3 litros con carburador de cuerpo sencillo o doble, que podía entregar potencias de 50, 54 o 60 caballos, y torques de 90, 95 y 98 Nm, con transmisión manual de cuatro velocidades o automática de tres. Existió también un 1.4 litros de 90 caballos en Argentina, un 1.6 en México y un 1.647 c.c. en Estados Unidos, además de una infinidad de variantes.
En 1970 se adicionó la carrocería Break y la versión de alto rendimiento firmada por Gordini, esta última con motor de 1.6 litros con dos carburadores de doble cuerpo, capaz de entregar hasta 113 caballos de potencia a 6.250 rpm y un torque de 147 Nm a 4.500 rpm, asociado a una caja manual de cinco velocidades.
Así, se abonó el terreno para que este auto adquiriera una popularidad de inmensas proporciones hasta el punto de producirse en nueve países y venderse prácticamente en todas las regiones del planeta.
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En Colombia: Esencial y robusto
Luego del éxito alcanzado por los Renault 4 y Renault 6 que ya acaparaban gran parte de las ventas de vehículos en Colombia, el Renault 12 fue el tercer modelo que llegó a las líneas de ensamble de Sofasa, destinado a un naciente segmento de vehículos sedán de tamaño medio en el cual competía con el Dodge 1500, que había llegado a vitrinas apenas un par de semanas antes.
El modelo producido en la planta de Envigado, Antioquia, se presentó el 11 de septiembre de 1973 en dos versiones: TL sedán particular y Taxi.
Iban equipadas con un motor de 1.300 c.c. alimentado por un carburador Solex 32 con choke manual y corrector altimétrico, capaz de entregar hasta 60 caballos de potencia a 5.250 rpm y un torque de 95 Nm a 3.000 rpm, asociado a una transmisión manual de cuatro velocidades.
Contando con tracción delantera, frenos delanteros de disco y suspensión independiente en las cuatro ruedas, el Renault 12 TL de lanzamiento incluía en su dotación de serie asientos reclinables en vinilo, descansabrazos central en la segunda fila de asientos, tablero iluminado, calefacción y juego de herramientas. Destacaba el amplio espacio interior, donde podían ir cinco pasajeros adultos cómodamente ubicados.
Entre septiembre y diciembre de 1973 se produjeron 1.550 unidades de este vehículo, cifra muy destacada teniendo en cuenta la limitada capacidad de la fábrica para ese momento y el corto lapso de tiempo.
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Más espacio
Gracias a la excelente aceptación del sedán, el 30 de octubre de 1974 llegó a las vitrinas la Renault 12 Break, primer vehículo de su tipo que se ensamblaba y vendía en el mercado nacional, con iguales características mecánicas al R12 Sedán pero un espacio interior sustancialmente más amplio gracias a la carrocería de cabina extendida.
La Break fue el carro ideal para las familias grandes pues no solo llevaba a los jefes de hogar a sus trabajos, a las señoras al supermercado y a los niños al colegio, sino también a todos al mismo tiempo a todos los rincones del país y a diversos planes familiares como los «asados» y «paseos de olla».
Así, este auto tomó un especial protagonismo como un miembro más de la familia, en un tiempo donde todos se reunían y compartían juntos, sin depender de dispositivos o aparatos externos como suele suceder hoy.
Una nueva cara
La primera serie de los Renault 12, con nomenclatura TL para el sedán y TN para la Break, estuvo vigente en el mercado entre 1973 y 1976. Para entonces se presentó la segunda serie, un «facelift» o actualización de media vida que adoptaba un nuevo diseño de parrilla frontal, nuevos bumpers, nueva plancha de bordo y nuevo diseño para la zona posterior con grupos ópticos más grandes.
El cambio fue muy beneficioso en términos comerciales, pues en 1977 el Renault 12 se convirtió en el carro más vendido en Colombia, superando incluso al Renault 4. Vale recordar que en aquel entonces, la marca francesa ostentaba cerca del 70% de participación en el mercado nacional.
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Pero la competencia empezaba a despertar y, ante la llegada de nuevos modelos como el Dodge Polara 1800 y el Dodge Alpine, el R12 subió de nivel en 1979 con el nivel de acabado TS, aplicado tanto al sedán como a la Break.
Se adicionaron accesorios como apoyacabezas delanteros, consola central, piso alfombrado, bocelería cromada en el exterior, faros regulables según carga, luz de reversa en el sedán y baúl tapizado con rieles de desplazamiento en la Break.
Siendo ya el Renault 12 casi una «joya» sobrevalorada (aún hoy) en el mercado del usado, antes de terminar 1979 se sumaron a la dotación de serie el tacómetro y las punteras de caucho en los bumpers, permaneciendo así hasta abril de 1981, cuando fue reemplazado por el Renault 18.
Una carrera de éxitos
A lo largo de ocho años vigente en las líneas de producción de Sofasa, se produjeron 56.250 unidades del Renault 12 sumando las carrocerías sedán (36.235) y Break (18.100), en versiones particular y taxi (1.915). Aún hoy es un auto muy recordado y valorado por los conocedores de autos antiguos, siendo relativamente alta su tasa de supervivencia gracias a la existencia de repuestos y la facilidad de su mantenimiento.
En noviembre de 1999, los lectores de la Revista Motor ubicaron al Renault 12 en segundo lugar dentro de la elección del carro más popular del Siglo XX en Colombia, solo superado por el Chevrolet Chevette.
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Comercial de televisión (Francia, 1970)
Óscar Julián Restrepo Mantilla – Director Revista Virtual El Carro Colombiano.