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El grupo Stellantis decidió fabricar internamente sus componentes para reducir costos en la transición hacia los carros eléctricos.
En una sorprendente estrategia para reducir costos y mejorar la eficiencia, Stellantis anunció su intención de fabricar internamente muchos de los componentes de sus vehículos eléctricos. Este movimiento se inspira en el enfoque de integración vertical del gigante chino BYD, conocido por su autosuficiencia en la producción de componentes automotrices.
Carlos Tavares, CEO de Stellantis, subrayó la necesidad de este cambio durante una conferencia desde la planta de Melfi en el sur de Italia. “Cuando los proveedores no corren a la misma velocidad que nuestros equipos, nuestros equipos ven un gran beneficio en la subcontratación”, afirmó Tavares. “Llegas a la conclusión de que lo que has subcontratado, puedes hacerlo internamente”.
Este cambio de estrategia se produce en un contexto de ralentización de la demanda de vehículos eléctricos en Europa, donde los créditos más caros y la disminución de las subvenciones han afectado negativamente a las ventas. En respuesta, Stellantis está siguiendo el ejemplo de BYD, que ha logrado reducir significativamente los costos de producción al fabricar internamente componentes clave.
Inspirados en BYD
Y es que, BYD, el mayor fabricante de carros eléctricos e híbridos enchufables del mundo, ha establecido un modelo de integración vertical que Stellantis busca replicar. La compañía china produce internamente semiconductores, faros LED, baterías, transmisiones, ejes y sistemas PHEV, entre otros componentes.
Además, controla la logística y el abastecimiento de materias primas, poseyendo incluso sus propias minas de litio. En tal sentido, Stellantis, que recientemente adquirió una participación en el fabricante chino Leapmotor para fabricar y comercializar autos eléctricos económicos en Europa, planea aumentar su integración vertical.
Este enfoque no solo pretende reducir costos, también garantizar un suministro constante y controlado de componentes esenciales. A pesar de los beneficios potenciales, esta estrategia implica desafíos significativos.
Por lo anterior, Tavares ha mencionado que los precios de la energía en Italia son “totalmente no competitivos”, lo que ha llevado al grupo a considerar la producción de su propia electricidad en la fábrica de Melfi, que actualmente produce modelos de Jeep y Fiat.
Costos de los vehículos
Es de resaltar que el peso de los proveedores en la fabricación de un carro es considerable, representando entre el 30% y el 35% del calor total de un vehículo en Europa. Con la fabricación interna de más componentes, Stellantis espera reducir estos valores y mejorar su competitividad en el mercado global.
La decisión de Stellantis de adoptar una mayor integración vertical podría ser un cambio de juego en la industria automotriz. Al reducir la dependencia de proveedores externos y controlar más aspectos de la producción, el grupo automovilístico no solo puede reducir costos, también mejorar la calidad y la fiabilidad de sus vehículos eléctricos.
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