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Volkswagen, BMW y Jaguar Land Rover están en el ojo del huracán tras haber importado carros a Estados Unidos con componentes electrónicos de un proveedor chino sancionado.
En un informe del Comité de Finanzas del Senado de Estados Unidos, se ha descubierto que Volkswagen, BMW y Jaguar Land Rover importaron vehículos a este país con componente electrónicos de Sichuan Jingweida Technology Group, proveedor chino en la ‘lista negra’ del Gobierno de Joe Biden desde 2021.
Hay que señalar que este hallazgo ha generado toda una gran controversia en la industria automotriz. de acuerdo con la información del Comité de Finanzas, BMW importó más de 8.000 carros de su marca Mini, específicamente del modelo Mini Cooper.
Mientras que Volkswagen admitió en enero de 2024 que un envío de sus automotores destinados al mercado estadounidense incluía componentes fabricados por Sichuan Jingweida Technology Group, otra empresa prohibida.
Repercusiones para las marcas
Por su parte, Jaguar Land Rover, afirmó desconocer sus vínculos con el fabricante sancionado cuando el comité les pidió rectificar sus prácticas comerciales en enero. En tal sentido, el comité fue contundente en su denuncia. “Los fabricantes de automóviles esconden la cabeza bajo tierra. El autocontrol en la industria, claramente, no está funcionando“.
Es de recordar que, el Congreso de Estados Unidos aprobó en 2021 una legislación para reforzar las leyes contra la importación de bienes de la región china de Xinjiang. Pues, presuntamente, son producidos bajo regímenes de trabajo forzoso.
Por lo anterior, esta normativa ha sido clave para intentar frenar la entrada de productos con cuestionables prácticas laborales al mercado estadounidense. Entre tanto, las acciones de BMW y Volkswagen han reaccionado negativamente ante esta noticia.
Para ser puntuales, las acciones de BMW cayeron un 0,65% en la Bolsa de Valores de Frankfurt, cerrando a 95,27 euros por acción, acumulando una pérdida de más del 6% en lo que va del año. Volkswagen también sufrió un retroceso del 0,87%, situándose en 119,35 euros por título. En contraste, los títulos de Tata Motors, matriz de Jaguar Land Rover, ganaron un 1,88% en la jornada.
Este escándalo pone de manifiesto la complejidad y los riesgos inherentes a las cadenas de suministro globales. Aunque los fabricantes de automóviles deben cumplir con normativas estrictas, este incidente subraya la necesidad de un control más riguroso y transparente.
Paola Reyes Bohórquez. Con información de agencias.
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