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Un nuevo estudio reveló que el costo de las baterías para carros eléctricos ha caído un 90% desde 2008. En tal sentido, la pregunta es ¿estos vehículos serán más asequibles en el corto plazo?
En un avance sin precedentes para la movilidad eléctrica, un reciente estudio de la Oficina de Tecnologías de Vehículos del Departamento de Energía en EE.UU. reveló que el precio de las baterías de carros eléctricos ha experimentado una caída vertiginosa del 90% desde 2008.
Este descenso en los costos no solo representa un alivio para los fabricantes. Además, está configurando un futuro en el que los vehículos eléctricos sean más asequibles para el público en general.
De acuerdo con el informe, en 2008, una batería de iones de litio valía 1.415 dólares por kWh. Mientras que en 2023, este valor se redujo, quedando en 139 dólares. En tal sentido, este cambio radical ha sido posible gracias a los avances en tecnología y producción en masa, que han permitido a los fabricantes de baterías optimizar sus procesos y reducir costos de manera significativa.
Carros eléctricos más baratos
La disminución de precios es crucial para el crecimiento del mercado de vehículos eléctricos, ya que las baterías representan uno de los componentes más costosos de estos vehículos.
Es de anotar que el estudio se basó en una muestra de carros ligeros con una producción de alrededor de 100.000 unidades al año. Así las cosas, La revista Motor realizó una proyección de cifras por kWh. En tal sentido, para la batería de 81 kWh del Tesla Model Y en 2008 tendría un costo de 114.615 dólares. Sin embargo, el valor de esta misma en 2023 fue de 11.259 dólares
Este cambio no solo beneficia a los consumidores, también impulsa a los fabricantes de automóviles a acelerar la transición hacia la producción de vehículos eléctricos. Con menores costos de producción, se espera que las empresas puedan ofrecer unidades a precios más competitivos, lo que provocaría un aumento en la adopción a nivel mundial.
Impacto en el mercado
La caída en el precio de las baterías también tiene implicaciones significativas para la sostenibilidad y el medio ambiente. A medida que los carros eléctricos se vuelven más accesibles, es probable que la demanda de vehículos de combustibles fósiles disminuya, reduciendo así las emisiones de gases de efecto invernadero y contribuyendo a la lucha contra el cambio climático.
Además, el desarrollo continuo de nuevas tecnologías, como las baterías de estado sólido, promete mejorar aún más la eficiencia y el costo en el futuro. Este progreso podría catalizar una adopción masiva de vehículos eléctricos, transformando la industria automotriz y el transporte en general.
Sumado a esto, el estudio resalta que los costos de las baterías seguirán bajando en el corto y mediano plazo. Hay que resaltar que un ejemplo claro de paridad en precios de carros eléctricos y a combustión lo ha logrado BYD en China, todo debido a su capacidad de producción en masa.
En conclusión, la dramática reducción en los costos de las baterías para vehículos eléctricos es una excelente noticia tanto para los consumidores como para el planeta. No solo facilita el acceso a tecnologías más limpias, sino que también impulsa a la industria automotriz hacia un futuro más sostenible.
Paola Reyes Bohórquez.
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