Aunque suena como algo que no es verdad, en los años 2000 existió un mini todoterreno de Mazda basado en Suzuki Jimny.
Mazda sorprendió a finales de los años noventa con el lanzamiento del pequeño todoterreno «Mazda AZ-Offroad». Este modelo, aunque poco conocido fuera de Japón, es una parte interesante de la historia de la marca en la cual, gracias a una colaboración con Suzuki, incursionó en el segmento de los kei cars con su propio modelo basado en el popular Jimny.
El Mazda AZ-Offroad debutó en 1998 y su producción se extendió hasta 2014, como un vehículo dedicado exclusivamente al mercado japonés. Se derivaba directamente del Suzuki Jimny de tercera generación, bajo un acuerdo que le permitía a Mazda, a parte del Jimny, comercializar varios modelos kei basados en sus productos.
Este capítulo en la historia de la Mazda también nos revela que, para esa misma época, contaba con varias submarcas creadas para diversificar su cartera. Pero que, con el objetivo de ahorrar en costos, buscó aliados como Suzuki. Por ejemplo, el «AZ-Offroad» viene de la submarca Autozam dedicada a vehículos pequeños vendidos únicamente en el mercado doméstico.
«Mazda Jimny» al detalle
Apodado como «Mazda Jimny», el Mazda AZ-Offroad replicaba fielmente todas las características del Suzuki Jimny de tercera generación que, para el caso, tenía ciertas variaciones respecto al modelo que se vendía en occidente, con el fin de adaptarse a los estándares de los kei cars. Entonces, tenía parachoques más cortos y ruedas más delgadas.
Además, ambos mini SUVs todoterreno tenían en común los rangos de su parte delantera como una parrilla rectangular que conectaba con los faros principales redondos a cada lado. En el capó se integraba una entrada de ventilación y las luces antiniebla estaba en la misma pieza del parachoques. La única diferencia radicaba en el logotipo.
En cuanto a los aspectos técnicos y mecánicos, el AZ-Offroad se equipaba con un motor de 660 cc turboalimentado de tres cilindros, capaz de generar 64 caballos de potencia conectado a una caja de cambios manual de cinco velocidades o automática de cuatro marchas. El sistema de tracción a las cuatro ruedas venía con reductora.
Siendo así, y a pesar de su reducido tamaño, verdaderamente tenía capacidades todoterreno. Vale aclarar que el sistema de propulsión tenía cifras limitadas que también debían adaptarse a los estándares obligatorios de los vehículos homologados como kei cars, y sus dimensiones no superaban los 3,4 metros de longitud; 1,4 metros de ancho y 2,0 metros de alto.
Gran equipamiento para su categoría
Mazda se aseguró de tener un vehículo kei todoterreno de alto nivel, y su AZ-Offroad fue uno de los más equipados de su categoría. Incluía aire acondicionado, asientos traseros abatibles, radio CD o MD dependiendo del año, dos airbags en las últimas versiones, frenos ABS y dirección asistida, así como llantas de aleación en el tope de gama.
Un dato importante es que, mientras otros modelos cambiaban de generación, el Mazda AZ-Offroad usó la misma base durante sus 16 años de trayectoría comercial, dando testimonio de su solidez. Hoy en día este modelo se ha convertido en pieza de interés para los coleccionista y aunque solo se vendía en Japón, algunos ejemplares lograron exportarse a Europa y EE.UU.
¿Conocía al «Mazda Jimny»?
LEA TAMBIÉN: RAM vuelve a su esencia – después del V8 prepara su regreso a la NASCAR
Jessica Paola Vera García.