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Conductores de vehículos eléctricos en Medellín expresan su frustración por la mala gestión y el mantenimiento deficiente de las estaciones de carga de vehículos eléctricos.
La movilidad eléctrica en Medellín, reconocida como pionera en este campo, enfrenta desafíos significativos según las quejas de conductores de vehículos eléctricos de servicio público.
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Y es que, la infraestructura de carga, administrada por EPM, ha sido objeto de críticas. Los conductores señalan la dificultad para encontrar estaciones de carga operativas en óptimas condiciones.
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Uno de ellos describe la situación de manera jocosa pero reveladora. “Acá en Medellín es una paridera para encontrar una estación que funcione. Como las ambulancias buscando un hospital, nos toca ir de estación en estación hasta dar con una buena“.
Los problemas persisten
A pesar de que el proyecto de estaciones se presentó en 2017 como una novedad tecnológica, las quejas actuales destacan problemas persistentes. Aunque el número de estaciones ha aumentado a 27 en 2023, el parque de vehículos eléctricos en la ciudad supera los 5.000.
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Las críticas se centran en la disponibilidad y el estado de las estaciones. Según los cálculos de los conductores, solo están operativas 12 de las 20 estaciones de EPM, las ubicadas dentro de espacios privados.
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Se menciona que algunas han estado fuera de servicio durante años, y los conductores destacan la falta de mantenimiento y la demora en las soluciones a los informes de daños.
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Además, las estaciones de carga rápida no cumplen con las expectativas de velocidad de carga, llevando hasta tres horas recargar vehículos con baterías de 60 kilovatios. Esto afecta directamente a los conductores de servicio público que requieren tiempos de recarga más rápidos.
Respuesta de EPM
El Colombiano consultó a EPM sobre estas quejas, por lo que la empresa respondió ante las quejas asegurando que solo dos estaciones han presentado inconvenientes de inestabilidad.
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Sin embargo, los conductores sostienen que la realidad es diferente. La empresa señala posibles fallas por mala manipulación de conectores y equipos por parte de los usuarios, así como el uso no autorizado de adaptadores de carga.
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Las quejas de los conductores reflejan la necesidad de mejorar la infraestructura de carga para impulsar el crecimiento de la movilidad eléctrica en Medellín. Aunque se inaugura una nueva estación en El Chagualo, persisten desafíos, y la clausura de la estación en el Éxito de Laureles mientras inauguraban otra resalta la complejidad del problema.
Paola Reyes Bohórquez. Fuente: El Colombiano.
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