Elon Musk desvía la atención de las ventas lentas de carros eléctricos y empuja las acciones de Tesla a nuevas alturas. Así, demuestra una vez más su capacidad para transformar la narrativa a favor de la empresa.
El año 2024 ha sido un verdadero desafío para Tesla con Elon Musk enfrentándose a numerosos problemas, desde la lucha por el control de la compañía hasta despidos masivos y el aplazamiento del carro eléctrico de USD 25.000. Estos factores volátiles llevaron a una caída del 43% en las acciones hasta el 23 de abril, fecha en la que Tesla reportó sus últimos resultados.
Sorprendentemente, las acciones de Tesla han experimentado una notable recuperación, añadiendo más de USD 386 mil millones a su capitalización de mercado en solo 11 semanas. A pesar de resultados financieros poco inspiradores y bajas expectativas para el segundo trimestre que se informará el martes, Musk ha logrado desviar la atención de las lentas ventas actuales hacia el potencial de la compañía en un futuro dominado por la inteligencia artificial.
“El verdadero cambio de juego para la valoración de Tesla radica en la capacidad de Musk para posicionar de manera convincente a la compañía como líder en tecnología de IA y autonomía”, comentó Adam Sarhan, fundador y CEO de 50 Park Investments, según reseñó Bloomberg.
Expectativas de Tesla
Las opciones de comercio sugieren que las acciones de Tesla podrían experimentar un movimiento del 8% en cualquier dirección tras los resultados del segundo trimestre. Musk probablemente abordará el informe de Bloomberg del 11 de julio sobre el aplazamiento de la presentación del prototipo de robotaxi, inicialmente prevista para agosto.
El CEO confirmó un “cambio de diseño importante” en los carros, sin especificar la naturaleza de la alteración o el tiempo adicional necesario para su implementación. Tom Narayan, analista de acciones en RBC Capital Markets, comentó: “el informe del segundo trimestre de Tesla probablemente será una decisión difícil para los inversores, dadas todas las partes móviles”.
Hay que anotar que Musk ha impulsado la recuperación anunciando la aceleración de nuevos modelos, incluidos vehículos más asequibles, para finales de este año. Anteriormente, se esperaba que la producción de automotores de próxima generación comenzara en la segunda mitad de 2025.
La valoración de Tesla, que se negocia a aproximadamente 94 veces las ganancias futuras, sugiere una fuerte creencia en la capacidad de Musk para cumplir con sus promesas sobre los autos autónomos, en contraste con General Motors y Ford, que se negocian a múltiplos de un solo dígito.
Conducción autónoma
Sin embargo, el agresivo esfuerzo de Musk por vincular la suerte de Tesla a la autonomía también ha tenido inconvenientes. El retraso en la presentación del robotaxi, informado por Bloomberg, provocó una caída del 8.4% en las acciones, la mayor en un solo día desde enero.
Las expectativas para las ganancias del segundo trimestre de Tesla son la mitad de lo que eran hace un año, con una proyección de ganancia de 58 centavos por acción y unos ingresos de USD 24.1 mil millones, según Bloomberg. A pesar del potencial de IA, los inversores esperan que Musk reavive el crecimiento en el negocio de vehículos eléctricos mientras los ingenieros desarrollan la tecnología de conducción autónoma.
“Tesla tiene atributos significativos para ser valorada como una beneficiaria de la IA, pero la empresa debe ver una estabilización en las revisiones negativas de ganancias dentro del negocio automotriz primero”, señaló Adam Jonas de Morgan Stanley.
Para concluir, la capacidad de Elon Musk para desviar la atención hacia el futuro potencial de Tesla y alejarla de las actuales dificultades de ventas es un testimonio de su habilidad para manejar las expectativas del mercado. No obstante, será crucial que la compañía no solo mantenga el interés en su visión de IA y autonomía, sino que también asegure el crecimiento en su negocio de carros eléctricos a corto plazo.
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