PUBLICIDAD
Con la llegada del 2020 también se cumplieron los 25 años de la aparición del SUV más grande de Toyota, el Mega Cruise. Aunque ya no se encuentra en producción, se destacó entre los vehículos de su tipo por sus particulares características.
El Toyota Mega Cruiser llegó a su cuarto de siglo, y a pesar del transcurso de los años aún ostenta el título de «el SUV más grande» la marca nipona. Fue diseñado principalmente para usos específicos de actividad militar, pero al mismo tiempo contó con una lote destinado a una versión civil.
El vehículo se vendió exclusivamente en Japón hasta 2002, un año después de que su producción se canceló. Luego algunos ejemplares tomaron otro rumbo a mercados internacionales, llegando a países como Estados Unidos, Reino Unido, Rusia y Australia.
A nivel local el Mega Cruiser prestó sus servicios como vehículo de transporte de infantería de alta movilidad para la Fuerza de Autodefensa de Japón. Para el desarrollo de las funciones militares el gran SUV se ofreció en diferentes tipos de carrocería, de techo fijo y convertibles.
25 años «no se cumple todos los días»
Y es que el Toyota Mega Cruiser sea el SUV más grande construido en la historia de la marca, no es vano. Sus medidas corresponden a 5 metros de longitud, 2.2 metros de ancho y 2.1 metros de alto. Su peso sobrepasa los 2.8 toneladas y su generosa carga llega a los 750 kilogramos.
Por fuera es más que evidente lo imponente del vehículo, que en rasgos es similar al Hummer H1 con líneas cuadradas y muy definidas. Con cuatro puertas de acceso (para el caso del modelo de techo fijo) tiene capacidad para seis ocupantes.
En su frente, una discreta parrilla frontal de diseño en líneas horizontales y a cada lado faros cuadrados. El parachoques tradicional en negro, sobresale en el frente, y en su parte trasera lleva una rueda de repuesto y hay una escalera. Otras unidades dependiendo el uso, presenta más o menos accesorios en la carrocería.
Tren motriz
La última edición del Mega Cruiser que se presentó en Japón, portaba bajo en capó, un motor Turbo Diésel de 4.0 litros y cuatro cilindros. Producía 148 caballos de potencia y se conectaba a una y transmisión automática de cuatro velocidades. Siempre de tracción a las cuatro ruedas.
La variante civil solo se fabricó en carrocería con techo fijo y para ese entonces fueron 100 unidades las que se vendieron. Hoy cumpliendo 25 años, el SUV Toyota más grande, podría facturarse por seis cifras en dólares aunque a ojo no se podría calcular una valor exacto.
Lea también: Un Toyota Land Cruiser 1984 que combina detalles modernos con su encanto clásico.
Jessica Paola Vera García.
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
