PUBLICIDAD
Este icónico Plymouth Road Runner de 1968 se puso al día con una serie de mejoras integrales para poder salir a subasta.
Con varios años encima, este Plymouth Road Runner de 1968 decidió someterse a una restauración integral para poder salir a subasta. No solo presume de un auténtico aspecto, sino que destaca por su llamativo traje exterior azul metálico con detalles cromados y ruedas de acero del mismo tono.
.
Además, este novedoso coupé clásico cuenta con unas insignias ‘Hellephant’, que dan una idea de lo que tiene en su corazón. En cuanto a su interior, mantiene el estilo ‘viejo escuela’, pero con una serie de modernas actualizaciones.
.
Entre las grandes novedades de su cabina está un sistema de control climático Vintage Air e indicadores de ‘aspecto analógico’ de Dakota Digital. Súmele una novedosa tapicería de dos tonos y una palanca de cambios de piso Lokar.
Plymouth Road Runner de 1968: al detalle
A nivel mecánico, este clásico coupé salió de fábrica con un motor V8 de 6,3 litros, pero fue sustituido por una configuración armada Hellephant de 7.0 litros sobrealimentado. Este esquema alcanza 1.000 hp y 1.2867 Nm de torque.
.
Además, esta configuración está administrada por una transmisión de carreras 4L80E con un controlador TCI. También, incluye cabezales TTI, un radiador de aluminio que ayuda a mantener todo ‘fresco’ y una batería que se reubicó en el baúl.
.
Por si fuera poco, el modelo cuenta con frenos Wilwood y una pare trasera Dana 60 de Strange Engineering, así como un Street-Lynx de cuatro enlaces en la parde de atrás. Es más, incluye amortiguadores roscados ajustables de Viking Performance.
Sandy García Tarazona.
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD