El Toyota Yaris R o Scion iA que se comercializa en el mercado norteamericano es producto de la alianza entre los fabricantes japoneses Mazda y Toyota.
Recientemente se presentó en México el Toyota Yaris R, vehículo producido en dicho país en la planta de Mazda ubicada en Salamanca, Estado de Guadalajara. Sí, es un Mazda 2 Sedán con los emblemas de Toyota, ni más ni menos.
Se trata de un proyecto conjunto entre ambas firmas japonesas que inició en 2012, con el que buscan reducir costos de fabricación y aprovechar las economías de escala, algo que no es nuevo para Toyota pues en Europa fabrica el modelo Aygo en unión con el grupo francés PSA Peugeot Citroën y en Japón le proporciona a Subaru el automóvil deportivo BRZ.
En el país de los mariachis, este modelo subcompacto tiene el apellido R pues allí aún se vende el Yaris sedán de tercera generación importado de Australia, además de la versión hatchback proveniente de Francia. En los mercados de exportación se comercializa como Yaris a secas en Canadá y Puerto Rico, y como Scion iA en Estados Unidos.
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¿A cuál se le parece?
Nadie puede negar que el Toyota Yaris R es en esencia un Mazda 2 sedán, muy notable de perfil por los trazos del lenguaje de diseño Kodo que es común en los modelos de la mencionada marca, en la parte trasera se sigue conservando esa identidad pero en las luces traseras hay una ligera variación porque están enmarcadas en un marco de fondo negro.
En el frente, el aporte de Toyota produce cierta controversia. Las luces tienen un aire a GT 86, la parrilla una combinación entre la de un Corolla norteamericano con exploradoras empotradas al estilo del Camry de producción asiática; estas son estándar en el acabado XLE, con bordes cromados.
Por sus formas puede catalogarse entre la cuestión de amor y odio. Los rines son de 15 pulgadas en el nivel LE y de 16 pulgadas en la XLE.
En cuestiones mecánicas…
Bajo la tapa del motor, encontramos el motor SKYACTIV-G; nombre registrado por Mazda y que Toyota no puede utilizar, con 1.5 litros de desplazamiento de cuatro cilindros y 16 válvulas, que produce una potencia de 106 caballos a 6000 rpm y un torque de 103 libras-pie a 4000 revoluciones, en tanto que la transmisión puede ser manual o automática con opción de modo sport y manejo pseudomanual, ambas con seis velocidades.
La suspensión es de tipo McPherson con barra estabilizadora adelante y semi-independiente con viga de torsión atrás. La dirección es de piñón y cremallera con asistencia eléctrica sensible a la velocidad del vehículo.
Los frenos son convencionales con discos ventilados frontales y con tambores traseros, que se complementan con el sistema antibloqueo ABS y distribución electrónica de frenado EBD.
Equipamiento
En el interior a simple vista no se ven grandes diferencias con su primo el Mazda 2 (ver artículo), las excepciones son, obviamente, el logo empresarial en el centro del volante y más exhaustivamente el diseño de fondo del velocímetro.
Todas las versiones ofrecen vidrios, seguros y espejos eléctricos, asiento trasero abatible 60/40, y aire acondicionado con función manual.
El sonido base consiste en un radio con sonido de alta definición, AM – FM, reproductor de CD y entrada de USB con salida de cuatro bocinas, mientras que la XLE ofrece un sistema de entretenimiento con pantalla de 7 pulgadas sensible al tacto o modo joystick y seis parlantes, todos ofrecen conectividad Bluetooth y controles de mando al volante. Otro detalle es el encendido Smart Key con botón.
En el apartado de la seguridad quedo con lo justo, se resalta el doble airbag delantero y el sistema ISOFIX y LATCH para llevar las sillas de los niños, pero se extraña un Sistema de Control de Tracción TCS y el Control Dinámico de Estabilidad DCS.
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¿Llegaría el Toyota Yaris R a Colombia?
Para responder esta pregunta, hay que explicar que el Toyota Yaris de fabricación tailandesa visto en la pasada edición del Salón del Automóvil se trajo a modo de exhibición para medir su impacto entre el público.
El Yaris tailandés hubiera tenido un alto precio de venta en nuestro país por pagar un arancel de 35%, además de que estaría canibalizado con el costo del Corolla de entrada (versión L) que en este año paga solo 21% de la mencionada alícuota a causa de la desgravación del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos.
En contraste, entre México y nuestra nación no hay aranceles por lo que los carros importados desde esa nación ofrecen precios muy atractivos y el Yaris podría llegar a un costo competitivo para enfrentar a rivales como el Chevrolet Sonic, Nissan Versa, Ford Fiesta, Hyundai i25, Kia Rio, Renault Logan Privilege, entre otros.
Aunque si bien el carro en cuestión está destinado a los mercados de América del Norte, en Brasil se estuvo probando un prototipo hace algunos meses, quedando allí cancelado el proyecto de su comercialización por asuntos cambiarios y comerciales.
En últimas, la posibilidad de que este vehículo llegue al país está abierta y la decisión recae en el representante de la marca en el país, Automotores Toyota de Colombia.
Galería Fotográfica
Textos: Fabián Rojas Castañeda – Redacción El Carro Colombiano.
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