El bólido más capaz de Gordon Murray alcanza potencias de hasta 725 HP y produce más downforce que su propio peso.
Del Gordon Murray T.50 ya hemos hablado en este portal. El heredero del McLaren F1 que llegó en agosto pasado y que vuelve a presentarse ante la prensa con mejoras dignas de un nombre de leyenda: la versión S Niki Lauda.
La nueva versión del hiperdeportivo británico no es solo una simple transformación estética del modelo original, como suele suceder con las versiones especiales. Tampoco es una de esas que trae cambios sencillos en la mecánica que se solucionan con una reconfiguración rápida del computador de abordo.
En cambio, se trata de un bólido significativamente más ligero y capaz que la primera edición, un rediseño notorio tanto a nivel externo como interno, que busca rendirle homenaje al tres veces campeón de la Formula 1, fallecido en 2019.
Aerodinámico
Dicho esto, lo primero que salta a la vista en el nuevo GMA T.50S Niki Lauda es su clara estética de carreras, con un prominente espóiler tipo labio en el frontal, que fluye hacia una nueva aleta superior que parte el aire y, a su vez, conecta con un gigantesco alerón trasero.
Destacan también un set de agallas en la parte superior del cofre, justo arriba de las llantas frontales, y otro juego de entradas de aire mucho más notorias justo delante del eje trasero.
En términos estéticos se mantiene el ventilador trasero, que ayuda a reducir el arrastre y maximizar la potencia, pero cambia la configuración interna, de un conductor central y dos pasajeros, a un conductor y sólo un pasajero. Con todo eso, logra un downforce de 1.500 kg muy superior al de 322 kg del original.
Potente
Así las cosas, resta hablar de las capacidades del GMA T.50S, magistralmente afinadas: a pesar de mantener el motor Cosworth atmosférico V12 de 3,9 litros, logra pasar de una potencia de 654 HP a 725 HP, mientras que el torque escala de 467 a 485 Nm. Eso sin contar un máximo de 12.100 rpm.
Adicionalmente, cambia la caja manual de seis velocidades por un sistema IGS, con el mismo número de marchas y controlado a través de paletas tras el volante. Con todos los cambios, el peso baja de 986 a 852 kg.
Con todo, el auto puede oscilar entre velocidades máximas de 273 y 338 km/h dependiendo del modo en que se use. Nada mal para un auto de 3,6 millones de euros, $15.700 millones colombianos, sin impuestos, y del que solo se harán 25 ejemplares, comenzando en enero de 2022.
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