El Gobierno aplazó el incremento de peajes y lo concentrará en una sola alza que impactará a los colombianos a principios del 2025.
El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, confirmó que el incremento de los peajes programado para diciembre de 2023 será aplazado y se unificará con el ajuste previsto para 2025. Este cambio busca normalizar las tarifas tras el congelamiento de 2023, que dejó un déficit fiscal de más de $400.000 millones.
Según Bonilla, «es el momento de normalizar el tema de los peajes», explicando que esta medida permitirá consolidar ambos aumentos en un solo ajuste del 10%, a inicios del próximo año. El congelamiento parcial de los peajes en 2023 generó controversia y demandas por incumplimiento de contratos.
En tal sentido, el incremento de 4,64%, correspondiente a la mitad del PIB de 2022 (9,28%), solo se aplicó parcialmente en agosto. Esto dejó una deuda estimada en $1 billón, según la Contraloría General de la República, por los subsidios otorgados. El ajuste unificado cubrirá estaciones gestionadas por Invías y la ANI, garantizando recursos necesarios para el mantenimiento y operación de las vías.
El impacto de los congelamientos
Juan Martín Caicedo, presidente de la Cámara Colombiana de la Infraestructura (CCI), respaldó la medida del Gobierno al señalar que los ingresos por peajes son esenciales para financiar las concesiones privadas y garantizar la continuidad de los proyectos viales.
El directivo indicó a El Colombiano que “el recaudo es clave para la construcción, operación y mantenimiento de las vías. Vemos con buenos ojos los anuncios recientes de los ministros”. Así mismo, el DANE ha subrayado que el impacto de los peajes en la inflación es «casi nulo» (0,02%).
Pese a las justificaciones del Gobierno, los conductores y transportadores han expresado su preocupación por el aumento en los costos operativos. Estos ajustes podrían generar un efecto cascada en los precios finales de bienes y servicios, afectando directamente a los consumidores.
Si bien la unificación del incremento parece una solución pragmática para aliviar el impacto fiscal, queda por verse cómo afectará a los transportadores y la economía de los colombianos. Es vital que el Gobierno garantice la transparencia en la ejecución de estos recursos para mantener la confianza en el sistema.
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Paola Reyes Bohórquez. Con información de El Colombiano.
