Frente al variante comportamiento del sector de vehículos eléctricos, buena parte de los concesionarios de Ford en EE.UU., no quieren entrar de lleno a los EVs.
La carrera de la electrificación generó frenetismo en los fabricantes de automóviles, casi cegados por las maravillas que suponen ofrecen los vehículos eléctricos. Sin embargo, la emoción duró poco para algunos y los resultados no han sido los esperados. Frente a un panorama incierto, los concesionarios de Ford en Estados Unidos no están tan dispuestos a vender EVs.
Por lo menos la mitad de los distribuidores estadounidenses del óvalo azul, no ofrecerán modelos eléctricos en 2024. Decisión basada en varios argumentos que llevan a la conclusión de que todavía no es el mejor negocio. Y si pensabamos que Ford iba a estar preocupado por el asunto, no es así, ya que la propia marca reducirá sus esfuerzos en el área de la electrificación.
Si bien durante 2022 vimos elevarse con creces las cifras en la venta de carros ‘cero emisiones‘, este año la demanda no se ha comportado de la misma manera. El interés de los consumidores parece no ser igual, y debido a que los costos en la producción de EVs es alto, tampoco es posible hacer ofertas realmente atractivas para los clientes.
Panorama de los carros eléctricos de Ford
Cuando el programa para la distribución de vehículos eléctricos de Ford se comenzó a promocionar el año pasado en Estados Unidos, cerca del 65% de los concesionarios había aceptado formar parte, siendo un total de 1.920 tiendas. El número de inscritos a la fecha no aumentó sino, por el contrario, se redujo. Ahora solo hay 1.550 distribuidores dispuestos a vender modelos ‘cero emisiones’.
Esto en términos de porcentajes, corresponde a poco menos de la mitad del total de la red de concesionarios en dicho país. Un factor importante que los llevó a declinar, sería el aporte de unos 500.000 dólares que debe hacer cada tienda para capacitación y equipo de EVs. Siendo así, no podrán obtener la insigina «Model E Certificado» que otorga la marca.
La respuesta del óvalo azul demostró una aparente calma, manifestando que la tasa de adopción de vehículos eléctricos puede variar en cada zona de EE.UU., y confia en que los concesionarios conocen bien su mercado y los intereses de los consumidores. Además, Ford también desaceleró sus proyectos en el ámbito de la electrificación reduciendo la producción e inversiones.
Por ejemplo, para 2024 reducirá a la mitad la producción de la F-150 Lightning. Eso quiere decir que su Centro de Vehículos Eléctricos, ubicado en Dearborn, Michigan, pasará de despachar 3.200 unidades a solo 1.600 unidades por semana. Aparte de postergar las inversiones en la pick-up, también hará lo mismo en su proyecto para el desarrollo de baterías.
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Jessica Paola Vera García. Fuente: Carscoops.
