Todo parece indicar que el mercado automotor en Colombia se enfrentaría a un aumento en los precios de los modelos Fiat, Chevrolet, Toyota y Renault, entre otros, en los próximos dos meses.
En una reciente carta, Colombia habría comunicado a Brasil su intención de no continuar con el «entendimiento entre los gobiernos de la República Federal de Brasil y la República de Colombia sobre la profundización de preferencias arancelarias bilaterales en el sector automotor».
Este cambio provocaría un aumento en los precios de vehículos importados desde Brasil, afectando marcas como Fiat, Toyota, Chevrolet y Renault entre otros. Esta noticia la dio a conocer el diario económico Portafolio. Además de esto, se verían afectados también el suministro de chasises y motores para Transmilenio.
Y es que la nueva normativa se implementaría a finales de septiembre o comienzos de octubre. Esta decisión, junto con la falta de definiciones en otras regulaciones colombianas, podría provocar la salida de ciertos modelos y marcas del mercado que provienen del vecino país, como por ejemplo Renault Kardian, Fiat Pulse, Chevrolet Onix, entre otros.
Golpe al sector automotor colombiano
Es de resalta que el mercado automotor en Colombia, ya afectado por una caída en las ventas, recibirá un golpe adicional con esta decisión. La reacción inicial sugiere que es poco probable que las ventas de carros en el país repunten en el corto plazo debido a este incremento de precios.
Este cambio también impactaría a los principales vendedores de vehículos híbridos, ya que modelos como el Toyota Corolla Cross híbrido actualmente proviene de Brasil. Aunque los automotores híbridos gozan de preferencias de entrada al mercado colombiano, esta medida probablemente afectará ese segmento.
Así las cosas, la decisión de Colombia de no continuar con el entendimiento arancelario con Brasil tiene implicaciones significativas para el mercado automotor. Los consumidores deberán prepararse para el aumento de precios de darse en positivo esta determinación y la posible disminución de opciones disponibles en el mercado.
Negociaciones, aspecto clave
Cabe anotar que este movimiento puede tener efectos adversos significativos en los consumidores y en la industria automotriz, que ya enfrenta desafíos en un mercado en declive. La clave ahora estará en cómo las marcas y el gobierno manejen esta transición para mitigar los impactos negativos.
Paola Reyes Bohórquez. Con información de Portafolio.