Mientras KTM AG enfrenta una pausa productiva en su planta de Austria, Autocolombiana asegura que en el mercado nacional mantendrá inventario completo de motos, repuestos y más.
Para nadie es un secreto que KTM AG enfrenta uno de sus mayores desafíos operativos al anunciar la suspensión temporal de actividades en su planta principal de Mattighofen, Austria, entre mayo y julio de 2025. Esta decisión, explicada como parte de un proceso de reestructuración corporativa y adaptación a las nuevas normativas medioambientales EURO 5+, ha generado inquietud entre los entusiastas de la marca a nivel mundial.
Sin embargo, para el mercado colombiano hay un mensaje de tranquilidad. Autocolombiana, representante oficial de la marca en el país y parte del conglomerado Autogermana, emitió un comunicado enfático donde reafirma que las operaciones comerciales y de posventa continuarán con normalidad.
Así, de acuerdo con el comunicado, los concesionarios de la marca de motos mantendrán disponibilidad de los modelos más populares como las series Duke, Adventure y RC. Además de contar con inventarios completos de repuestos y accesorios.
El mal momento
El trasfondo de esta pausa productiva en Europa se remonta a noviembre de 2024, cuando KTM AG se vio obligada a declararse en insolvencia técnica debido a graves problemas financieros que pusieron en riesgo su continuidad. La situación llegó a tal extremo que Bajaj Auto, socio estratégico indio de la marca, tuvo que realizar una inyección de capital de emergencia por 50 millones de euros para evitar el colapso total.
Gottfried Neumeister, director ejecutivo de KTM, explicó en conferencia de prensa que «la producción se vio severamente afectada tras el paro técnico de 90 días, logrando fabricar apenas 4.200 unidades antes de agotar existencias». Como medida transitoria, los 3.500 empleados de la planta austríaca tendrán jornadas reducidas a 30 horas semanales hasta julio, cuando se espera retomar la producción plena tras una reorganización que incluye negociaciones con acreedores por más de 600 millones de dólares.
Frente a este complejo escenario internacional, Autocolombiana ha implementado una estrategia preventiva que incluye el aseguramiento de inventarios y el fortalecimiento de sus redes logísticas. En tal sentido, el importador ha trabajado en estrecha coordinación con la casa matriz para garantizar que sus clientes no experimenten interrupciones en el servicio o disponibilidad de productos.
Por ahora, la compañía mantiene abiertos todos sus canales de atención al cliente y ha reforzado sus equipos técnicos para responder a la demanda habitual, pues afirma que su prioridad es mantener la confianza de la comunidad KTM en Colombia, que sigue creciendo gracias al atractivo de productos alineados con los más altos estándares de calidad y desempeño.
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Paola Reyes Bohórquez.