Desde 2020 Toyota viene consolidando su proyecto para producir baterías de estado sólido para sus carros EV. Se espera que en 2028 sean una realidad.

Mientras que el desarrollo del sector de carros eléctricos avanza en la industria automotriz, hay un punto que ha estado en las principales preocupaciones: las baterías. En la búsqueda de optimizar este sistema de almacenamiento de energía, las de estado sólido suponen un gran avance frente a las actuales baterías de iones de litio. En este sentido, Toyota promete tener listo uno de sus proyectos en 2028.

El fabricante japonés ha puesto más esfuerzos en crear y producir baterías de estado sólido, que las propias de ion-litio. Esto en coherencia con su actitud renuente a los EV tal y como los conocemos hoy en día. El principal argumento es que no satisfacen todas las necesidades de los usuarios, aunque su posición frente a los eléctricos puede cambiar, si sus nuevas baterías de nueva tecnología logran cubrir todas las necesidades.

En sí, las baterías de estado sólido tienen una configuración similar a las de iones de litio. Se compone de electrodos y se conforman celdas, pero la principal diferencia radica en el electrolito conductor que en el caso de las baterías actuales es líquido, y en las nuevas, como su propio nombre lo indica, es sólido. La fórmula se puede crear a partir de elementos como cristal, oro y manganeso, inmersos, a su vez, en gel.

Toyota Baterías de estado sólido

Toyota Baterías de estado sólido

Toyota liderada el desarrollo de baterías de estado sólido

Si bien Toyota no reveló la ‘receta’ de sus baterías de estado sólido, sí confirmó que todo está dispuesto para incorporarlas en sus vehículos eléctricos en 2028. Los beneficios que se les atribuyen son, una mayor capacidad de almacenamiento de energía a razón de su mayor densidad, reflejado en rangos de autonomía más amplios. Además, los tiempos de carga serían más cortos y su vida útil más larga.

Con este panorama, se dio a conocer de manera extraoficial que los baterías de estado sólido de Toyota, se implementarán primero en los modelos premium de la marca, y su producción en serie estarán limitada en un primera etapa a solo 2.000 unidades. Teniendo en cuenta que, una de las proyecciones de ventas EV es entregar 3.5 millones de vehículos a 2030, solo aplicará a una mínima parte. Progresivamente, la producción de las nuevas baterías debería aumentar a 10.000 unidades.

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Estos planes, van en línea con la reciente presentación de varios modelos conceptuales que anticipan las próximas novedades de la marca para su cartera de eléctricos. Como un nuevo crossover y un sedán de formato deportivo. Modelos que deberían llegar a acompañar al SUV bZ4x que es el único ‘cero emisiones’ que vende a nivel global. A pesar de resistirse, Toyota ha hecho esfuerzos por adaptarse a la tendencia de la electrificación, pero muy a su manera.

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Jessica Paola Vera García.