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Alessandro Tartarini, piloto y fundador de Velocifero, firma de motocicletas eléctricas, logró alcanzar una velocidad de 198 km/h en su scooter eléctrico en Monza.
El icónico circuito italiano de Monza ha sido testigo de un nuevo récord de velocidad. Pero esta vez, la hazaña no involucra un poderoso carro de Fórmula 1, sino un scooter eléctrico.
Alessandro Tartarini, piloto y fundador de Velocifero, logró alcanzar una velocidad máxima de 198 km/h en su prototipo de scooter eléctrico. Así, estableció un nuevo hito en el mundo de la movilidad eléctrica.
Este piloto, hijo del legendario Leopoldo Tartarini, quien también dejó su huella en Monza en los años 50, realizó esta impresionante acción. Su scooter eléctrico es un verdadero prodigio de la ingeniería.
El scotter eléctrico
El vehículo cuenta con un motor eléctrico de 200 CV montado en el centro de la moto. Una distribución de peso óptima y una posición de conducción altamente aerodinámica.
Así, el récord lo certificó grupo de jueces del Comité Olímpico Italiano (COMI) y es un tributo tanto a la pasión por las motocicletas como al legado de su padre Leopoldo Tartarini. Este último también estableció un récord de velocidad en Monza en 1969, pero en un vehículo de tres ruedas.
Para lograr este hito, Alessandro Tartarini se inclinó en su scooter, buscando la posición más aerodinámica posible, y aceleró de 0 a 100 km/h en tan solo 3,6 segundos. Este logro demuestra el potencial de la movilidad eléctrica en el mundo de las dos ruedas y subraya la capacidad de innovación de Velocifero.
Aunque esta marca de velocidad en scooter puede parecer sorprendente, es un testimonio de la evolución de la tecnología eléctrica en el mundo de las motocicletas. Con 198 km/h en Monza, Alessandro Tartarini ha demostrado que la velocidad y la sostenibilidad pueden ir de la mano en el emocionante mundo de las dos ruedas.
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Paola Reyes Bohórquez. Fuente: Xataka.
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