Esta ‘limusina ártica’ es probablemente la más agresiva que veremos; está fabricada en aluminio y puede cargar hasta 3.400 kilos.
Esta limusina es una especie de bunker montado sobre seis ruedas casi iguales que las de un camión de carga, no en vano soporta hasta 3.400 kilos. Ahora mismo está en venta mediante una subasta, nada menos que en el Marketplace de Facebook, y su ubicación es desde Wisconsin, en EE.UU.
Detrás de esta creación está el fabricante Sherp, especialista en todo tipo de vehículos pero enfocados en operaciones de exploración y rescate. De ahí que hayan puesto al límite su capacidad, dandole a vida al modulo Ark 3400, añadiendo un remolque trasero con un gran espacio para 22 pasajeros.
El aspecto físico de esta limusina podría gustarle a más de uno, pero no la imaginamos aparcando en la bahía de un hotel de lujo cómo se acostumbra. Sin embargo, una gran mina de carbón o una excursión a la montaña resultaría ser el escenario ideal para verla en acción.
Con todo el armamento
Bautizada como ‘Sherp the Ark’, la bestial limusina esta equipada, como ya lo decíamos, con seis neumáticos de gran tamaño, resistentes a cualquier terreno. Además un sistema de dirección de tres ejes la complementa, logrando una elevación frontal para derrapar todo tipo de obstáculos.
Por si fuera poco, estas llantas también cumplen la función de suspensión, al tiempo que pueden inflarse y desinflarse gracias a los escapes del motor. Lo anterior en virtud a que están interconectados, de manera que el aire se distribuye de uno a otro cuando se atraviesa algún obstáculo en el camino.
En cuanto a la mecánica y motor, dentro de la limusina habita un Doosan D24 diésel de cuatro cilindros y 2.4 litros con turbocompresor. Esta maquinaria completa en total desarrolla 75 CV de potencia y 320 Nm de par, junto con una caja manual de cinco velocidades, que alcanzan hasta 30 km/h.
De otra parte, gracias a los 8 logra tener una amplia autonomía de hasta 82 horas andando. En términos generales, la ‘limusina ártica’ tiene un buen desempeño, sin embargo quién aspire a tenerla se llevará un gran reto.
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Maria Alejandra Villamizar Sarmiento.
