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Alemania junto a otros países de la Unión Europa, piden replantear la prohibición de autos a combustión en el viejo continente.
Si bien en teoría, un escenario libre de emisiones suena aparentemente ‘perfecto’, el camino para llegar a él, está enfrentando varios obstáculos en Europa. La propuesta de la Unión Europea (UE) de prohibir los autos a combustión en 2035, sigue sin ser aprobada.
La votación definitiva que estaba prevista para el 7 de marzo de este año, fue aplazada debido a la objeción de Alemania frente a la redacción del documento final del proyecto. Este país, así como otros que son miembros del organismos. tienen varias dudas.
Una vez analizado el panorama, que solo da un plazo de 12 años para la eliminación de los autos nuevos impulsados a gasolina o diésel, se plantea una perspectiva que debería dar espacio para los combustibles sintéticos o e-fuels.
¿Logrará Alemana y su coalición que la UE ceda con los e-fuels?
El país bávaro no está solo en ‘su lucha’, pues países como Italia, República Checa, Polonia, Rumania, Hungría y Eslovaquia, se unieron a favor de los e-fuels. La propuesta es, que estos puedan usarse después de 2035 como una alternativa más amigable con el medio.
Uno de los argumentos, es el plazo relativamente corto para todos los autos nuevos sean eléctricos (es poco más de una década). Esto también supone que los costos de producción sean mayores, razón por la cual acceder a un vehículo será cada vez más caro para los usuarios.
En el fondo tampoco se quieren ‘dejar morir’ los motores términos, por lo que en términos de conducción y experiencia representan. Es por ello, que las esperanza están puestas en los combustibles sintéticos que permitirán una transición más lenta a electrificación total.
Otro aspecto del que no están muy convencidos estos países europeos, hace referencia a la Norma Euro 7 que según los cálculos, debería entrar en vigencia en 2025. Pasa básicamente lo mismo. Se considera que es muy poco realista y apresurada.
Pues si bien se había previsto implementarse a partir de 2027, la Unión Europea aceleró el proceso. La Euro 7 plantea que las emisiones de óxido de nitrógeno (NOx) deben reducirse en un 35%, y las partículas finas en un 13%.
Estando así las cosas, todavía hay mucho por desenredar en este asunto, y Alemania parece estar firma en su postura de los e-fuels. El estudio de las implicaciones ambientales y económicas deberían ser temas estudiados más a fondo, por encima de ‘visiones’ idealistas.
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Jessica Paola Vera García. Vía: Reuters
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