Con ya tres años de presencia en las vitrinas de Europa, Sudáfrica y Australia, no despegan las ventas de la Mercedes-Benz Clase X. Por eso, Daimler decidió no darle continuidad al modelo y finalizar su comercialización cuando lo estime conveniente.
La arriesgada apuesta que supuso el estreno de la pick-up Mercedes-Benz Clase X, no obtuvo los resultados esperados. Este tipo de vehículo, inédito en la gama de la estrella, buscaba cubrir un mercado nuevo para ellos atándolo a su familia de vehículos comerciales y de trabajo, pero la clientela no ha correspondido favorablemente.
Por eso, según informó Automotive News, para reducir los costos que implica su existencia, Daimler decidió que la Clase X finalizará su vida comercial sin un reemplazo, y esa muerte podría ocurrir antes de lo inicialmente previsto.
Cabe recordar que, además, hace unos meses se canceló el proyecto para producir la Mercedes-Benz Clase X en la planta de Renault-Nissan en Córdoba, Argentina, desde donde se abastecería el mercado latinoamericano.
¿Qué salió mal?
Las cifras señalan que, durante 2018, apenas se vendieron 16.700 unidades de la Mercedes-Benz Clase X en Europa, Sudáfrica y Australia, territorios donde actualmente se comercializa. Situación complicada, teniendo en cuenta que los dos últimos son mercados de gran importancia para el segmento de pick-ups.
Ni siquiera en Alemania, principal mercado de la marca de la estrella, esta pick-up ha logrado hacerle mella a competidores como las Volkswagen Amarok o Ford Ranger.
La principal causa por la cual no la Clase X no habría logrado el éxito sería su relación precio/equipamiento, pues ofrece una dotación muy similar a la de sus competidoras, a un precio mucho mayor: 37.294 euros, unos 135 millones de pesos colombianos, como precio base.
Prima de la Frontier
La Mercedes-Benz Clase X salió al mercado internacional en 2017, fruto de un desarrollo realizado en el marco del acuerdo entre Daimler y la Alianza Renault-Nissan. Comparte plataforma con las Nissan Frontier y Renault Alaskan y, de hecho, se fabrica en la misma línea de producción en la planta que Nissan tiene en Barcelona, España.
Por ahora, la prioridad para el grupo alemán es enfocar sus réditos en hacer la transición hacia la movilidad eléctrica, con el desarrollo de sus nuevos modelos dentro de la gama EQ.
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Óscar Julián Restrepo Mantilla. Fuente: Automotive News.